A ELEGGÚA

En la regla de OCHA, Eleggúa no tiene templo de cemento: su casa es la encrucijada, la puerta, el río, el cuerpo humano.
En el río no hay espectadores: todos entran desnudos, es aquí donde Eleggúa no se representa sino se encuentra.
Imágenes desde la fé y no sobre la fé.
Cuerpos, agua, piedra y luz nada más , nada menos…